La jaula de oro

Las cosas en el trabajo podrían ir mejor. Hace años que necesito un cambio. Ya lo dicen por ahí, la administración es una jaula de oro.

Como siempre, cuando el trabajo marcha regular, acudo a formas de expresión creativa. Cantar cura, pero  me gusta tocar con gente, y eso las agendas no lo ponen fácil. Tengo ganas de escribir historias. De jovencita escribía, pero tantos años dedicados a escribir por y para la gestión profesional me han dejado la creatividad literaria, si es que algún día la hubo, en la más absoluta miseria.

Hace poco, comencé a pensar en un relato corto, ambientado en Florencia, mi ciudad favorita. A ver si los enfoques visual thinking que he descubierto últimamente me sirven de ayuda. Toda la vida pensando en visual, y ahora resulta que está de moda.

Por el momento, seguiré escribiendo recuerdos, reflexiones… Es curioso, todo empieza con “re”. Por cierto, escribir ya no huele. Sólo suena. No hay papel, ni tinta… sólo el ritmo de las teclas.

Autora: annacarrera.com

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